Rural Citizen 2030 avanza con paso firme. Desde la puesta de largo del proyecto a finales de abril, hemos seguido sumando integrantes a la plataforma online (¡ya somos más de 350!) y organizado diferentes jornadas inspiradoras y de trabajo con apoyo institucional para afrontar el reto demográfico, reestructurar las relaciones de las ciudades con los pueblos e impulsar desde el mundo rural el nuevo paradigma que reclama este momento inédito.

El 19 de mayo dimos el pistoletazo de salida a «Siente la llamada rural», un ciclo de jornadas online para responder, desde diferentes provincias anfitrionas, a la pregunta ¿cómo debe ser el mundo rural del siglo XXI? a través de siete áreas de exploración: Impulsar, Invertir, Conectar, Valorar, Vivir, Participar y Educar. La Diputación de Álava y la Cuadrilla de Añana fueron las anfitrionas del primer encuentro,  que sumó 321 inscripciones de personas de toda España, Europa y Latinoamérica.

Fue un éxito cuantitativo pero sobre todo cualitativo, con ponencias de gran calidad e interacción constante. Al mundo rural le desbordan las ganas de aportar, innovar, unirse y compartir para propiciar cambios. Así se percibió a lo largo de toda la jornada, un encuentro de un día completo estructurado en dos bloques: sesión de mañana, orientada a la divulgación y la inspiración con la participación de expertos en el ámbito de la innovación social y el emprendimiento rural; y sesión de tarde, destinada a la visibilización de las oportunidades de Añana y la conexión de agentes para cocrear en torno a la comarca alavesa.

Si fuimos capaces de organizar un 24 horas en torno al mundo rural, ¿por qué no una semana? La oportunidad llegó de la mano de Catalunya Rural Hub: un
proyecto piloto promovido por el Departament de Polítiques Digitals de la Generalitat de Catalunya en colaboración con Mobile World Capital Barcelona y Barcelona Digital Talent para favorecer la deslocalización de empresas y el emprendimiento más allá de los núcleos urbanos mediante el desarrollo de soluciones de trabajo en remoto efectivas.  Los objetivos son mejorar en calidad de vida, aumentar la productividad, retener el talento y fomentar el equilibrio territorial.

Para conseguirlo, ofrecimos Rural Citizen como herramienta para descubrir otras experiencias e identificar nuevas oportunidades. Su interés convergió con nuestra propuesta y nos pusimos manos a la obra. Organizamos un ciclo de actividades del 20 al 24 de julio compuesto por: una Jornada de ponencias para visibilizar buenas prácticas estatales e internacionales y proyectos en marcha sobre trabajo en remoto en la Catalunya rural; y dos workshops para buscar soluciones de trabajo en remoto que atraigan actividad empresarial a los pueblos.

Una vez más, fue un maravilloso éxito de asistencia y de trabajo. Más de 180 personas se inscribieron en la Jornada inspiradora y nos vimos obligados a colgar el cartel de completo de los networkings días antes de su celebración. Ahora, tenemos sobre la mesa las primeras pistas para activar un piloto en Catalunya que convierta el teletrabajo en una oportunidad real y efectiva en el mundo rural.

¡Seguimos!

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